viernes, 1 de febrero de 2013

RIDICULOTERAPIA

La sensación de ridículo proviene de una división nuestra; en la mente se da un escenario en el que hay uno que observa y otro que es observado. Se recrea la escena de ser mirado por otro y criticado, una escena que se construye en la experiencia pero que se interioriza. Así, no es necesario que ese otro esté presente para que su efecto inhibitorio se haga efectivo.

El sentimiento de ridículo es producto de una falta de concentración sobre si mismo, sobre los actos que son susceptibles de ser juzgados como ridículos. Pero, viéndolo bien ¿qué es ridículo y que no? Es una convención, pero en el fondo ningún acto es ridículo en sí mismo.

Baila como si nadie te estuviera mirando dice una presentación que circula en internet... Quizá es baila totalmente concentrado en lo que estás haciendo sin distraerte con el juicio del otro presente o el otro interno que te señala. Baile en el aquí y en el ahora.

Hacer el ridículo, por tanto, con total seriedad -entiéndase como coherencia con lo que se está haciendo- puede ser terapéutico, benéfico; aumenta el nivel de conciencia.

jueves, 4 de octubre de 2012

Una excelente definición

Tiene la belleza y la sabiduría de la precisión :

Reír es una modalidad no verbal de establecimiento de alianzas que transmite un mensaje de distensión y alegría desprovisto de toda hostilidad

Gabriel Olamendia, El arte de Reír, recuperado de : http://www.estoesmarketing.com/Arte/Elartedereir.pdf

martes, 2 de octubre de 2012

Humor y psicoterapia

Tal vez nos hemos tomado muy en serio la psicoterapia, al menos los psicoterapeutas. Winnicott dice que la psicoterapia se da en la superposición de dos zonas de juego : la del paciente y la del terapeuta. La psicoterapia tiene que ver con dos personas que juegan juntas.

La psicoterapia es un juego también para el paciente; a veces es un juego en el que el paciente se queja y pregunta al otro qué hacer, sabiendo que él sabe. Depende mucho del paciente cambiar de juego. También depende del terapeuta.

El tema es que no hay que tomarse demasiado en serio (no quiere decir que no se tome en serio) la psicoterapia, como si fuera el único remedio para los males, o como si fuera el remedio; quizá la psicoterapia es un intento, no uno de esos juegos de competencia en el que se recolectan puntos y va a una meta determinada, sino como uno de esos juegos sin puntos que se hacen por el puro placer (o por la necesidad) de jugar.

Tal vez me he tomado demasiado en serio eso (la psicoterapia) como si la responsabilidad del cambio en el paciente fuera mía y no de él. Puede ser un juego de esos juegos "como si" en los que fingimos que el otro es el doctor y nosotros el paciente. No es demasiado serio. En el fondo, el paciente sabe qué es lo que le sucede. Juega a que no lo sabe. Es un juego complejo, pero tal vez no sea otra cosa que un juego. Esto para los pacientes que tienen la capacidad de jugar. Tal vez no todos la tengan.

Psicoterapia con humor.

Del humorismo al humor


Hasta qué punto esos estímulos que nos hacen reír contribuyen a que tengamos una actitud más sana y más armoniosa con la vida, con los demás y con nosotros mismos. 

Es decir, hasta qué punto el humorismo contribuye a que tengamos un mejor sentido del humor y una actitud humorística ante la vida? porque a veces la risa, como en el chiste, que es una cosa que viene del inconsciente es como un destello, pero que pasado el destello vuelve a quedar sepultada en el inconsciente y no hay una modificación esencial del sujeto...

Hasta qué punto lo que nos hace reír (porque es que hay muchos tipos de risa, desde la risa malévola, sádica, hasta la risa que señala el absurdo, hasta la risa de "puro placer" de la que habla Piddington) contribuye a que tengamos esa actitud equilibrada ante la vida y la realidad que nos previene de las enfermedades provocadas por el estrés que no es otra cosa que una polarización sobre un asunto que termina por deprimirnos?